Loading...
Esta página web usa cookies Las cookies de este sitio web se usan para personalizar el contenido y los anuncios, ofrecer funciones de redes sociales y analizar el tráfico. Además, compartimos información sobre el uso que haga del sitio web con nuestros partners de redes sociales, publicidad y análisis web, quienes pueden combinarla con otra información que les haya proporcionado o que hayan recopilado a partir del uso que haya hecho de sus servicios. Leer más sobre las cookies
El aire de nuestra atmósfera es un bien indispensable para la vida. Todas las personas tienen derecho a su uso y disfrute y la obligación de su conservación. Es un hecho generalmente aceptado que las partículas, el dióxido de nitrógeno y el ozono troposférico son los tres contaminantes que más afectan a la salud humana.
 

Contaminantes primarios son los que se emiten directamente a la atmósfera desde los focos emisores.


Contaminantes secundarios son aquellos que se forman por reacciones químicas en la atmósfera a partir de los contaminantes primarios. Son importantes contaminantes secundarios el ácido sulfúrico, H2SO4, que se forma por la oxidación del SO3, el dióxido de nitrógeno NO2, que se forma al oxidarse el contaminante primario NO y el ozono, O3, que se forma a partir del oxígeno O2.


Inmisión es la concentración de contaminantes en un punto a consecuencia de las tasas de emisión y de los fenómenos de difusión. Es la cantidad de contaminación que se respira y se mide.


Partículas pueden tener diferentes composiciones y tamaños. La PM10 tiene un diámetro menor a 10 micras y pueden llegar hasta la tráquea, los bronquios y los bronquiolos. Las PM2.5, son inferiores a 2.5 micras y pueden alcanzar los alveolos pulmonares.


Los óxidos de nitrógeno NOx se originan, sobre todo, por el tráfico de vehículos diesel. Son precursores de otros contaminantes, como el ozono.


El ozono troposférico es un gas que se genera por la transformación química en la atmósfera, a partir de los óxidos de nitrógeno y de los compuestos orgánicos volátiles y por acción de la radiación solar. Por ello las concentraciones más elevadas se dan en zonas soleadas, en las horas centrales del día y durante el verano.

 

La estación de análisis de la calidad del aire ubicada en Muelle España, tiene en su interior analizadores y monitores de medida que miden la concentración del contaminante. Son analizadores en continuo, 24 horas al día 365 días al año, salvo averías. Toman una muestra del aire ambiente, previamente acondicionada y homogeneizada para ser analizada. Cada analizador, está conectado en continuo al terminal de adquisición de datos y este último, va capturando todos los resultados de cada análisis y cada cinco minutos, hace una media que es almacenada. Estos datos se comunican de forma continua al puesto central de datos.


Una vez que se reciben los datos muestreados, se realiza una validación de los mismos por un técnico cualificado con el software de explotación de datos y se publican en esta página web de la Ciudad Autónoma de Ceuta.


En la estación de análisis de la calidad del aire, los contaminantes que se miden con analizadores automáticos son los óxidos de nitrógeno (NO), dióxidos de nitrógeno (NO2), ozono (O3), y partículas (PM10 y PM2.5). Los  analizadores automáticos toman la muestra de aire a tiempo real y se basan en métodos físicos o químicos para detectar el gas o partículas que se quiere medir.  La técnica de medida es específica para cada contaminante.

 

La Directiva 2008/50/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de mayo de 2008, relativa a la calidad del aire ambiente y a una atmósfera más limpia en Europa, constituye la normativa de referencia en materia de calidad del aire en Europa. Esta norma modifica el marco regulatorio existente con objeto de incorporar los últimos avances sanitarios y científicos y la experiencia de los Estados miembros en la aplicación de las normas de calidad del aire, a la vez que sustituye, por motivos de claridad, simplificación y eficacia administrativa casi todo el régimen jurídico en materia de calidad del aire en Europa.


En España, la legislación básica de carácter general en materia de calidad del aire está constituida por la Ley 34/2007, del 15 de noviembre, de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera, cuyo objeto es establecer las bases en materia de prevención, vigilancia y reducción de la contaminación atmosférica con el fin de evitar y, cuando esto no sea posible, aminorar los daños que de ésta puedan derivarse para las personas, el medio ambiente y demás bienes de cualquier naturaleza.


La normativa estatal específica en materia de calidad del aire ha sido unificada en el Real Decreto 102/2011, de 28 de enero, relativo a la mejora de la calidad del aire.


Todo ello con la finalidad de evitar, prevenir y reducir los efectos nocivos de las sustancias mencionadas sobre la salud humana, el medio ambiente en su conjunto y demás bienes de cualquier naturaleza.